[Artículo publicado en la revista astrológica Mercurio – 3, nº 25/1999]
El secuestro de la farmacéutica de Olot es, sin duda, un caso que contiene numerosos aspectos sin precedentes dentro del género. Se trata del secuestro, sin finalidad política o terrorista, más largo de la historia de España (492 días). Es, además, atípico en cuanto a su duración, desarrollo y desenlace. La reciente detención de sus presuntos implicados ha hecho correr, nuevamente, ríos de tinta, apuntando un tanto magistral a la Guardia Civil, cuando la investigación parecía hallarse en un vía muerta y todo indicaba que éste iba a ser un caso más sin resolver.
Desde su inicio, el caso no ha dejado de generar polémicas. Inicialmente, la Guardia Civil culpó reiteradamente a agentes municipales y policías autonómicos de su ineficacia en las primeras pesquisas y, sobre todo, en la fundamental primera inspección ocular del vehículo de la secuestrada. Los detectives privados, contratados por la familia para arrojar alguna luz sobre el caso, todavía añadieron más confusión al mismo. Para rematar la jugada, un buen día apareció alguien delatando a dos viejos amigos e implicándolos en el secuestro. La actitud de la familia, por otra parte, ha sido también muy poco convencional, negándose incluso a facilitar una foto de la secuestrada para su difusión en prensa.
Finalmente, para añadir otro dato de crispación al caso, todo parece indicar que los presuntos autores del secuestro son miembros de la policía local y vecinos de la farmacéutica. Este hecho ha resultado ser de gran importancia para destapar una serie de hechos delictivos de diferente naturaleza, imputados, en algunos casos a los encausados y, en otros, a otros miembros de la policía local. En fin, el asunto ha tomado un nuevo cariz que promete muchas novedades.
Análisis del tema horario: Viernes, 20/11/1992, 21:30 – Olot (42:11N/02:30E)
El tema horario del momento del secuestro resulta extremadamente elocuente para dilucidar los entresijos de la acción. Pero antes de abordar cualquier tipo de análisis, es lícito reconocer el legado de la tradición astrológica que, como veremos, aporta múltiples elementos de juicio aplicables al caso y permiten aventurar fácilmente que se trata de un secuestro muy largo y que la víctima sobrevivirá al mismo. A continuación se enumeran los aforismos más significativos, todos ellos extraídos de El libro conplido en los iudizios de las estrellas de Ali Aben Ragel:
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Por ser Mercurio el regente de la hora: “quien fuese preso en la hora de Mercurio tendrá larga prisión”.
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Por hallarse el significador de la víctima (Luna) en casa 4: “La mayor y más dura prisión es la de casa IV, así como son silos y lugares cerrados y lugares hondos”.
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Saturno en Acuario indica larga prisión.
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Los regentes de los ángulos en casas cardinales indican, también, larga prisión.
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“El señor del ascendente en ángulo, significa larga prisión, y sobretodo más afincado si estuviera en el ángulo de la tierra”.
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“Cuando aspectasen Saturno y Júpiter a la Luna, significa que saldrá de la prisión con buena fama y buen nombre y dirán de él buenos dichos, pero esto será después de una larga estancia en prisión”.
Síntesis de la interpretación:
La mayoría de los planetas por debajo del horizonte, junto con el agua como elemento dominante, sugieren, por una parte, grandes dificultades en el esclarecimiento de los hechos y, por otra, que numerosos aspectos del caso quedarán totalmente velados o se enredarán con otros de diferente naturaleza (el agua siempre tiende a desdibujar todo lo que toca) como, posteriormente, se ha evidenciado.
Marte en el ascendente habla inequívocamente de un hecho de carácter violento, que llegará a ser muy conocido (regente del MC angular) y que no tiene precedentes inmediatos (Aries). La Luna, regente del ascendente, significadora de la víctima, al estar situada en el fondo del cielo, define, sobre todo, cómo y dónde aquella se encontraba.
1. De dónde venía la víctima: la Luna, separándose de Júpiter, en casa 3, siendo éste regente de casa 6, indica que venía de trabajar y se hallaba entrando en su casa (cúspide de 4).
2. En qué dirección y cómo la llevaron: la Luna angular y en casa 4, es un claro indicador de que la ubicación se encuentra próxima a su domicilio. Venus, dispositora de la Luna, en Capricornio, sugiere en dirección sur. Además, Venus situada en una dodecatemoria de Aries, indica que el desplazamiento se ha hecho de forma rápida (conjunción Urano) y atropellada (cuadratura Júpiter): con posterioridad se supo que, durante el secuestro, el coche chocó contra una pared. En este sentido de celeridad, también colabora la moción rápida de la Luna (14º 11’).
3. Dónde la llevaron: la cúspide de casa 4 en Libra apunta la posibilidad de un lugar oscuro (caída del Sol), habitado por una pareja (Libra) de clase trabajadora (el regente se halla en casa 6); la Luna en dodecatemoria de Piscis da indicaciones de un sitio sucio, húmedo, con insectos y frecuentado por mucha gente heterogénea (Luna cuadratura Neptuno). Venus, regente de 4, en Capricornio, indica una zona de montaña, y por dodecatemoria Aries, una casa aislada, unifamiliar, que hace esquina, relativamente nueva y en una zona no demasiado poblada (Aries es un signo estéril). Por otra parte, la Luna cuadratura a Venus, sugiere un lugar que adolece de cualquier tipo de comodidad, resultando la más estresante, la carencia de water y agua (Luna cuadratura Urano, regente de casa 8).
4. Cómo se encuentra ella: la Luna, significadora de la víctima, en trígono a Saturno, indica que ésta tiene posibilidades de resistir la dificultad. Sabido es que ella se trazó un plan o estrategia mental para sobrevivir y mantener la moral: puso como objetivo prioritario volver a ver a sus hijos. Por otra parte, resultó sorprendente que la farmacéutica retuviera de forma precisa gran cantidad de datos que, posteriormente, han resultado concluyentes y plenamente fiables en la investigación y esclarecimiento de los hechos. Lo que precede, es consecuencia del citado trígono que, por otra parte, establece una gran empatía entre víctima y secuestradores, difícil de entender desde un punto de vista objetivo y ajeno a los hechos.
5. Móvil del secuestro: Aries en el medio cielo apunta hacia un móvil objetivo, primario y concreto, que no deja lugar a equívocos. Marte, el regente, angular y en aspecto único de trígono al Sol, regente de casa 2, define un móvil inequívocamente económico y con grandes posibilidades de llevarse a efecto (trígono). En este sentido, todo apunta a que se pagó el rescate, aunque este extremo todavía no se ha aclarado y todas las partes implicadas lo nieguen. De hecho, el Sol en Escorpio, siendo regente de la casa 2, en trígono a su dispositor, angular en Cáncer, insinúa que el rescate se planteó en dos entregas (Sol/dodecatemoria Libra), en un sitio cerrado (Sol en casa 4 a partir de Leo), ruidoso (trígono Marte) y a través de un mensajero (conjunción Mercurio, regente de 3) anónimo (Mercurio también rige la 12), en el extranjero (Sagitario).
6. Secuestradores: Saturno, regente de casa 7 (enemigos declarados), al encontrarse domiciliado en Acuario sugiere un equipo heterogéneo, formado básicamente por cuatro personas jóvenes, con conocimientos técnicos o profesionales en este tipo de acciones. El trígono que Saturno recibe de Júpiter indica que son gente organizada, de profesión respetable y deportistas o de tipología atlética. Saturno en dodecatemoria Cáncer apunta a que están enraizados en la misma localidad de la víctima. Por otra parte, Marte en Cáncer (regente de la casa 4 de los secuestradores), también apoya este extremo.
La casa 12 de los secuestradores, por derivación, es Sagitario, y representa los puntos de debilidad que ellos tienen y que pueden conducir a su apresamiento. Obviamente, estos factores juegan a favor de los investigadores policiales que, además, también están significados por esta misma casa, toda vez que la policía no deja de ser un servicio social. Júpiter, el regente, en casa 3, indica que la prensa, los medios de comunicación, los chismes y el vecindario pueden canalizar favorablemente la investigación. Es más, siendo también Júpiter el regente de casa 9 (la publicidad), conviene que el asunto se airee incluso de forma desmesurada (Júpiter). La dodecatemoria capricorniana en la que se halla Júpiter induce a pensar que no será fácil encontrar pruebas, que éstas tardarán en aparecer, y que el posicionamiento del juez (Saturno) que lleve el caso, será determinante.
Venus en cuadratura a Júpiter añade una dificultad adicional a lo dicho, indicando una investigación sujeta a errores de juicio y pistas falsas. Como Venus rige las casas 5 y 10 de los secuestradores, los puntos débiles de éstos se conectan principalmente en cuestiones relativas al juego y el derroche (posiblemente alguno sea ludópata) y al status profesional. Venus en dodecatemoria de Aries, sugiere que los secuestradores tienen profesiones marcianas.
7. El juicio: por Capricornio en casa 7, será lento y lleno de sorpresas (Saturno/Acuario). Es factible que un tribunal popular juzgue el caso (Saturno/dodecatemoria Cáncer). El veredicto (casa 9) posiblemente será más indulgente de lo que se espera (Piscis) y dictaminará, al margen de los años de condena, extrañamiento para los inculpados, al situarse Júpiter en la casa 9 de éstos (obligación de viajar).
El tribunal tendrá que definir el grado de culpabilidad de los implicados pero, independientemente de la pena que se les designe, la sociedad ya los ha condenado. La víctima, una madre con tres hijos pequeños, hija de un acaudalado empresario de Gerona y propietaria de una farmacia, resultó ser el objetivo de unos desalmados que un día se cruzaron en su destino y lo marcaron para siempre. Pero, como se cita en el Gorgias de Platón: “el injusto jamás puede ser feliz, pues si recibe castigo será muy desgraciado, y si no lo recibe lo será aún más”.